Recuerdo cuando entré a la universidad, llena de miles de planes y metas para alcanzar, todo para llegar a ser una «mujer completa». Tantos planes a futuro y todos con fechas específicas para cumplirlas. La verdad es que creo que nunca antes había planeado mi futuro y nunca lo he vuelto a hacer, por lo menos no asi.
Mis planes no eran tan complicados ni difíciles de lograr, al menos eso es lo que yo pienso. Empezaba con terminar la universidad a mis 22 años, me tomaba un año y luego a mis 24 iniciaba mi maestría en Europa, y a mis 25 un postgrado para luego empezar a viajar y conocer el mundo por un par de años, casarme a mis 30 y mi primer hijo a mis 32 y el segundo a mis 34.
Mi realidad dio un giro muy grande antes de terminar mi último año de la universidad. En agosto del 2011 me fui a la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid y, dejando a un lado el romanticismo, conocí a Arturo y sin darme cuenta mis planes cambiaron. No sólo por Arturo sino porque me di cuenta que no era feliz y que no me conocía tan bien como pensaba, la JMJ me cambio sin yo darme cuenta.
Regresé a Panamá aún creyendo que podía seguir mi vida como antes y me encontré con que no podía. Terminé mi universidad en el 2012, apunto de cumplir mis 23. Al cabo de de unos meses decidí empezar mi maestría en enero del 2013 en Panamá, porque no quería y sentía que no debía irme a estudiar a otro país. Ya mis planes habían empezado a cambiar poco a poco, pero no me molestaba y creo que nunca lo ha hecho, pero estos cambios no había sido tan grandes como casarme 5 años antes de lo planeado.
Creo que cuando empecé a salir con Arturo me di cuenta que quería algo serio y que quería un futuro con el, y lo quería pronto. Recuerdo que mis amigas me decía que estaba loca por decirle a Arturo que me quería casar, pero no me importaba yo quería casarme con el. En agosto del 2014, Arturo me pidió casarme con el y decidimos casarnos en septiembre del 2015, pero por cosas de Dios nos casamos en Agosto. Para Diciembre ya estaba embarazada, aunque me enteré algo mas adelante y Ana nacional en agosto del 2015 (agosto es nuestro mes). En el 2016, volvía salir embaraza y aunque mi pequeña Angela, no está conmigo, la tuve en mi unas semanas.
Para mi todos estos cambios en mis planes vinieron acompañados de grandes cambios en mi vida, y aunque si fueron planeados no lo fueron los tiempos y han habido situaciones difíciles de afrontar como también momentos hermosos en mi vida, que quien sabe y si no hubiera ido a la JMJ no habrían pasado y quien sabe donde estaría ahora.
Muchos pensaran que soy una tonta por haber cambiado mis planes por Arturo, la realidad es que no los cambie por el, sino que las cosas se dieron y yo las acepté con tranquilidad. Muchos pensaran que soy una ilusa por pensar que el haber ido a la JMJ me cambió la vida, pero la realidad es que no saben en el lugar en que estaba antes y en el lugar en que estoy ahora, y no podría estar mas feliz de vivir la vida que vivo.
Todos estos cambios me han enseñado a confiar un poco en que Dios sabe que me espera en mi futuro y que si el lo permite es por algo y a no preocuparme tanto por ese futuro en el que no se que pasara.
Aveces es mejor no planear tanto a futuro y dejar que Dios trabaje en tu vida, las cosas se irán dando a medida que vayas viviendo el día a día como se debe. Las cosas empiezan a encajar y todo va saliendo como tiene que salir, no importan que tanto planees.
Slds,